Ya estamos cerca de las Navidades, unas fiestas basadas en la falsedad y la hipocresía, no solo por nuestra parte queriendo sacar de lo mas hondo de nosotros algún resto, si es que nos queda, de ternura y bondad, sino por el motivo de las fiestas en sí.
El cristianismo en su lucha por querer arrasar con todas las creencias anteriores, adoptó las principales fiestas paganas adaptándolas a supuestos acontecimientos relacionados con su credo. Este es el caso de las Navidades, fiestas en las que según el cristianismo nació Jesucristo, puro invento, que no tiene ninguna base histórica. No hay en las Sagradas Escrituras ninguna referencia a esta fecha en concreto y si nos atenemos a los datos que se dan, es imposible que fuera en esta fecha.
Por que entonces la iglesia puso estos días, muy sencillo, su único objetivo era anular con ello la fiesta pagana del "sol invictus" que los romanos celebraban en una fecha que se correspondía con el 25 de diciembre, fecha también en la que se celebraban los ritos mitraicos, dentro de unas festividades mas amplias con motivo del solsticio de invierno, en el mundo romano, "Las Saturnales", donde incluso las vacaciones de Navidad son una copia de estas Saturnales, en la que los esclavos eran exonerados de sus trabajos habituales y recibían una libertad que duraba hasta que terminaban las fiestas.
Así tenemos por un lado que no hay ninguna base histórica para poner en esta fecha el nacimiento de Jesús, principio de estas fiestas, lo mismo que la culminación, Los Reyes Magos, que en ningún sitio especifica que fueran tres, ni que fueran reyes, es mas, en el cristianismo la figura del tercer rey no se incorpora hasta el siglo XV.
Como es lógico unas fiestas basadas en falsedades "políticamente correctas" no podían dar otro resultado que unas fiestas donde lo "políticamente correcto", es decir, la falsedad y la hipocresía sean su base de sustentación. Vaya mierda de fiestas.
miércoles, 2 de diciembre de 2009
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