EL PARQUE DEL QUINTO CENTENARIO

Les ha costado trabajo y a todos los contribuyentes dinero para que den con la tecla, pero parece ser que al final lo han conseguido. No se si ha sido al cuarto o quinto intento, pero finalmente este parque ha quedado para lo que realmente tiene que servir un parque, además de para purificar el medio ambiente, para que sirva de expansión o de sosiego a los ciudadadanos.
Al final ha merecido la pena, lástima que por medio hayan tenido que pasar tantos intentos fallidos, pero como se dice "mas vale tarde que nunca" y hoy pequeños, padres y abuelos pueden disfrutar de un magnífico parque, con muchos juegos infantiles donde los pequeños disfrutan como enanos que son y los padres-madres-abuelos-abuelas pueden estar tranquilamente charlando sin tener que preocuparse de si a sus pequeños los pueda atropellar un coche o una moto.
Esperemos que este tipo de parque-jardin solo sea el primero en Palma y se vaya pensando en acondicionar los restantes de la misma forma. Que sean para el disfrute de todos los ciudadanos y si, por las circunstancias, tiene que haber un botellódromo donde los jovenes, sin importar si tienen edad de beber alcohol o no, se pongan hasta el culo, que no sea a costa de quirtarle al resto de ciudadanos un espacio, que de por si no está concebido para estos menesteres y mucho menos acondicionado. Es una pena ver el deterioro que en poco tiempo ha sufrido el jardin del paseo, un jardin que ha resistido todo tipo de ocupaciones y abandonos en los últimos veinticinco o treinta años, pero que si no se pone remedio le va a ser imposible superar esta última.
Así que, estimada Ana María ponte manos a la obra y consigue hacer del jardin del paseo un "espacio libre de bárbaros" lo mismo que has conseguido con el jardin del Quinto Centenario o Valparaiso, como querrais llamarle.