¿Nervioso ayer por el resultado del partido? que va, de ninguna de las maneras, nervioso en día que estaba viendo por la televisión en que urna se metía el bueno del pulpo, hasta que se decidió a meterse en la urna que tenía la bandera española, no veas que nervios y como se aceleraba el corazón.
Una vez que el pulpo llamado Paul señaló a España como ganadora, todo fue tranquilidad y sosiego y lo único que había que hacer era esperar a que nuestro capitán Casillas levantara la copa de Campeón del Mundo.
Este pulpo había dado ya muestras no solo de clarividencia, sino también de honradez y seriedad, sobretodo cuando en la semifinal tuvo que señalar la urna de España en vez de la de Alemania, cualquiera que hubiera estado en su lugar se hubiera planteado quedar bien o se hubiera planteado evitar que los alemanes le dieran la del pulpo por haberse ido a favor del enemigo, él no, él fiel a sus convicciones, se introdujo en la urna de España sin pensar en las consecuencias ni en su pellejo. Todo un ejemplo que los españoles de alguna forma deberíamos recompensarle, dada la tranquilidad que nos infundió.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario